TDAH

El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es el trastorno psiquiátrico más frecuente en la infancia. Se estima que lo padece el 5% de la población infantil-juvenil, lo que equivale a uno o dos niños por aula.

Este trastorno es biológico, de origen neurológico, provocado por un desequilibrio existente entre dos neurotransmisores cerebrales: la noradrenalina y la dopamina, que afectan directamente a las áreas del cerebro responsables del autocontrol y de la inhibición del comportamiento inadecuado.
El TDAH provoca en el niño las siguientes alteraciones en su conducta:
  • Hiperactividad: Presenta un nivel superior de actividad dada su edad. 
  • Impulsividad: Tiene dificultad para controlar sus conductas, emociones y pensamientos. 
  • Inatención: Tiene una gran dificultad o incapacidad para prestar atención y concentrarse. 
Estos síntomas no siempre están presentes conjuntamente - existen distintos subtipos de TDAH - y se manifiestan en al menos dos ambientes de la vida del niño (casa, colegio, etc.). Los niños son más propensos a sufrir TDAH que las niñas en una proporción de cuatro a uno.

EVOLUCIÓN

El TDAH es crónico y suele manifestarse antes de los 7 años. A lo largo del desarrollo del niño, sus síntomas pueden cambiar o disminuir; no obstante, se estima que más del 80% de los niños continuarán presentando problemas en la adolescencia, y entre el 30-65%, en la edad adulta.
Con respecto a las formas en que se manifiesta el TDAH, existen varias etapas:
Hasta los cinco años, los niños suelen presentar un desarrollo motor precoz. Comienzan a caminar muy temprano y en general, son descritos por los padres como niños inquietos, "impulsados por un motor".
Durante la edad escolar, los niños comienzan a tener problemas en el aprendizaje de la lectoescritura, lo que suele ocasionar fracasos escolares. Estos fallos se agudizan cuanto más se le exige al niño sin proporcionarle un tratamiento adecuado. En esta etapa es cuando más se detectan casos de TDAH.
En la adolescencia se producen cambios sustanciales. La hiperactividad suele disminuir notablemente hasta convertirse en una sensación subjetiva de inquietud. Aún así, más del 80% de los jóvenes sigue teniendo problemas de atención e impulsividad.

TIPOS

Existen tres tipos de TDAH, según el síntoma predominante en el niño:
  • Hiperactivo-impulsivo (predominan los síntomas de hiperactividad e impulsividad).
  • Inatento (predominan los síntomas de falta de atención).
  • Combinado (predominan síntomas de hiperactividad, impulsividad e inatención)

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